.... un minuto de comunicaciòn con nuestro Padre Celestial nos enseña a Ser Felices

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
Amén

martes, 29 de septiembre de 2009

Mi Concepto de Dios es Positivo

Amigo tú que eres mi prójimo, hijos de un mismo Dios y con un hermano en común:Jesucristo, no importando la religión que hayamos elegido para seguir su camino, te invito a leer estas líneas cuyo motivo es el de enaltecer a nuestro Padre Celestial.

Siempre me ha llamado la atención la frase "Dios está en todas partes, en el aire, agua, tierra, en el cielo, y donde tú mires allí esta él". ¡Que concepto más amplio, preciso, confortable!. Él esta presente en todo el universo que nos rodea: galaxias, planetas, países, poblaciones, seres humanos, animales , etc...: Qué grande y maravilloso es!. Dios es la energía pura que puede transformarse en todo lo que existe. Por ello debemos dar gracias por nuestra existencia como seres humanos y por todas las cosas que nos rodean: en conjunto hacemos la vida. No hace falta ser un superdotado para comprender y reconocer de una manera muy humilde sobre la real existencia de Dios, y que en su esencia es bueno y con un gran gusto natural para todo lo que esta energía creadora ha logrado. Siento mucho placer cuando hago una caminata por sitios naturales rodeados de exuberante naturaleza: arboles y plantas de todo tipo, animales silvestres, recursos acuíferos, aire fresco, y la agradable luminosa presencia del sol. Desde mi interior siento una alegría inmensa de sentir y disfrutar de tanta variedad!. Hago toda la reflexión anterior ya que siempre me ha llamado la atención cuando nosotros renegamos de la existencia de Dios en momentos y circunstancias que no nos son favorables: pérdida de un ser querido, tragedias, desgracias, entre otras. Fácil es atrincherarse en este tipo de pensamientos y actitudes negativas, que en vez de darnos aliento para levantarnos, lo que hacen hundirnos más en la depresión y la desesperanza. Una de las cualidades más valiosas que tiene el ser humano es su "libre albedrio", el cual puede ser usado para bien o para mal. También debemos recordar que la manera preferida adoptada por el ser humano para vivir es en "sociedad", en donde, es el ser humano quien fija las reglas de convivencia general. Otro de los factores externos que rigen nuestra existencia es el que hemos denominado "azar" y no es más que la forma de llamar al libre albedrio de los otros eventos no realizados por el hombre. Los tres elementos mencionados anteriormente juegan un papel trascendental en nuestro diario vivir, con grandes alegrías y satisfacciones, pero también con llantos y tristezas. Llegan a mi memoria las reflexiones del escritor Khalil Gibrán, en uno de sus libros, que decía un mensaje de advertencia y a su vez consolador: " amigo, recuerda siempre cuando estés en momentos de abundante alegrías que afuera te aguarda la tristeza, pero si tus momentos son de una tristeza atroz, tranquilo, que a ti te aguardan momentos futuros de mucha alegría". Está en nuestras manos el encomendarnos y pedir porque nuestros momentos sean en su mayoría mejores; recuerdan esta Oración: " Padre nuestro que estás en el cielo..........no nos dejes caer en la tentación más líbranos del mal amén!. He ahí como con fe, Dios nos deja su "teléfono particular" para que cada día nos acordemos de él y se nos pone a la orden para ayudarnos. Invito a todos los lectores que siempre nos acordemos de Dios en las malas, pero..... también acordémonos de él en los momentos felices, de diversión, de paz, a él también, por su esencia positiva, le encantará acompañarte. En mi caso particular uso mucho internamente la palabra mi mejor amigo para dirigirme a él, y tengo por costumbre solitaria, cuando estoy comiendo, disfrutando en una fiesta, paseo, etc: Miro al cielo, guiño el ojo, y digo: Padre, ven y disfruta conmigo!.

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Salmo 23

El señor es mi pastor, nada me faltará.
Él me hace descansar en verdes praderas, me conduce a las aguas tranquilas y repara mis fuerzas; me guía por el recto sendero, por amor de su Nombre.
Aunque cruce por oscuras quebradas, no temeré ningún mal, porque tú estás conmigo, tu vara y tu bastón me infunden confianza.
Tú preparas ante mí una mesa, frente a mis enemigos; unges con óleo mi cabeza y mi copa rebosa.
Tu bondad y tu gracia me acompañan a lo largo de mi vida; y habitaré en la casa del Señor por muy largo tiempo.

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